LIBUN

El Decreto 2650 de 1993, que establece el PUC para comerciantes, como parte fundamental en la aplicación sistémica del Decreto 2649 del mismo año, y que corresponde a la representación de manera práctica y ordenada del movimiento económico del giro de los negocios tanto para empresas comerciales, industriales como de servicios no financieros, que reflejan su composición en los estados financieros durante un determinado periodo de tiempo, mostrando la dinámica en que incurren los diferentes sucesos económicos, y de movimientos financieros, incluidos la previsión del registro contable en los cuales deben quedar inmersos dichos eventos, a través de una forma ordenada, lógica y sistémica en que se deben realizar las correspondientes imputaciones contables.
Dentro de este proceso se evidencia por parte de los autores la importancia de la aplicación de las Normas Internacionales de Información Financiera, IFRS, y su incidencia de manera íntegra en la aplicación del actual PUC para comerciantes amparado con el decreto 2650 de 1993.
El PUC ha sido contextualizado con las estructuras de los estándares internacionales de contabilidad y de información financiera en los cuales se establece la jerarquía de la norma como principios, políticas y procedimientos. Entre las políticas destacadas se agrupó el articulado teniendo en cuenta las políticas y estimaciones contables, identificando de cada una de ellas el objeto de reconocimiento de los flujos económicos, las bases de medición de los objetos reconocidos, las magnitudes contables y las revelaciones.